Figura 1. Esquema de las consecuencias de las modificaciones post-traduccionales en las proteínas CRTC2 y FOXO1 (adaptado de Klaus Kaestner, Cell Metabolism, 2008)

Si bien la importancia de comer verduras es ampliamente conocida y desde luego no es una novedad de la era moderna, que un consumo elevado de carne roja tiene efectos negativos para la salud es algo en que se está poniendo énfasis en las últimas décadas. 

Las células cancerígenas se caracterizan por su elevada reproducción, un proceso esencial para su supervivencia. Sin embargo, es un proceso que requiere mucha energía. Para ello, estas células introducen una alta cantidad de glucosa mediante transportadores. Esta glucosa será su principal fuente de energía. ¿Y si le impidiéramos ese transporte? ¿La célula tumoral sería capaz de sobrevivir?

Qué tienen en común la mina de un lápiz y un diamante? Seguro que muchos de ustedes conocen la respuesta. Tanto el grafito (mina del lápiz) como el diamante presentan una composición química idéntica, compuesta exclusivamente de carbono. Sin embargo, la disposición u organización de los átomos de carbono en el espacio es totalmente distinta, por lo que se denominan alótropos de carbono. Mientras la estructura del diamante es una red tridimensional compacta de átomos de carbono enlazados, el grafito se estructura en laminas (similares a un panel de abejas) unidas débilmente por los extremos. Así pues, el diamante es uno de los materiales más duros conocidos, mientras que el grafito es muy blando y permite su utilización como material de escritura. Sin embargo, estos no son los únicos sólidos estables o alótropos de carbono.